Es necesario un reseteo. Gálatas 6:7-8 “No se engañen. Dios no puede ser burlado. Todo lo que el hombre siembre, eso también cosechará” El apóstol Pablo presenta un principio que opera en todas las esferas de la vida, cada acción tiene una consecuencia. Día a día podemos escribir nuestro propio destino, porque inevitablemente nos convertimos en lo que hacemos, al final todos somos la suma total de nuestras acciones. El estado actual revela mucho acerca de nuestra historia. Lo que hoy somos se debe a lo que hicimos en el pasado y  lo que seremos mañana será debido  a las decisiones que tomemos constantemente. Ahora muchos se están entregando al placer de las drogas y del sexo fácil sin ningún tipo de  responsabilidad, por supuesto que, algunos han comenzado a cosechar los resultados,  contagio de  enfermedades como el COVID 19 y las enfermedades de transmisión sexual ETS destacando el Sida el cual ha alcanzado proporciones de epidemia en algunas regiones del mundo, también tendrán que sufrir consecuencias como el deterioro físico y mental de efectos irreversibles en el nivel personal como social. ¿Por qué? Porque todos los que se rebelan contra el Creador desechando sus principios no se saldrán con la suya, puesto que cuando se siembra lo que el pecado y la maldad humana ofrecen engañosamente se cosechará dolor y destrucción. Es necesario aceptar que somos responsables de nuestras acciones, Dios nos pedirá cuentas un día. Aún  hay oportunidad de hacer un reinicio en tu vida, arrepiéntete de tu forma de vivir, empieza a tomar decisiones para vivir de la manera que Jesús enseña en la Biblia, todo se convertirá en pasado y tu presente y futuro serán nuevos (2Corintios 5:17). 

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